lunes, 26 de marzo de 2012

Un mundo de todos





Estos señoritos, en su chulería, se olvidaron una vez más de que el mundo es de todos, no sólo de ellos. Se olvidaron de que no se puede engañar impunemente a la gente, de que a quien tomas por tonto, si no lo es, te acaba descubriendo y rechazando.

No hay nada menos rentable que obligar a los demás a ponerse a la defensiva porque se está así invadiendo su libertad, sus derechos, su espacio existencial. Si los expulsas de su mundo, en cuanto se den cuenta, nunca entrarán en el tuyo. Hay muchos aficionados a gobernantes que no se dan cuenta de esto y, torpeza tras torpeza, van desaprovechando sus oportunidades. Es lo que les pasa a estos políticos chulos, poco inteligentes y que sitúan su acción fuera del campo de la razón, que se dedican a ordenar el mundo con sus criterios, en lugar de organizarlo con los de todos, y que se creen con derecho a usar a los demás para favorecer sus intereses particulares. Mentes simples, torpes y peligrosas que deberían comenzar por no minusvalorar a los demás.

Siempre es el momento, pero ahora más, de intentar crear un mundo en el que quepamos todos, de escuchar a todos, de darle oportunidades reales a todos, de que una educación crítica y veraz y una cultura que ayude a vivir puedan llegar a todos, de que las condiciones materiales para vivir con dignidad puedan estar a disposición de todos.

Ya es hora de que los señoritos se bajen del burro que ellos creen cabalo. Y de que los que van en burro, o incluso sin él, se den cuenta de que también tienen derecho a aspirar a tener un caballo.  

viernes, 23 de marzo de 2012

¿Lo primero el empleo?



No sé qué quería decir el PP con esto que puso por todas las farolas, por todas las televisiones y por todos los mítines. ¿Era para que picaran los ingenuos?


Creatividad según Fran Valenzuela

Dice la cantante Francisca Valenzuela que la creatividad te hace más libre, te hace más poderos@, aumenta tu autoestima y te invita a vivir más. A mí me parece que tiene razón. ¿Y a ti?


sábado, 17 de marzo de 2012

No a la verdad




No aspiro a conocer la verdad de nada. Me parece que la verdad no existe en ningún sentido. A lo que aspiro es a tener mis opiniones cada vez más fundamentadas con argumentos racionales y, en la medida en que se pueda, constatables.

Por otra parte, dudo profundamente de todo el que aparece diciendo que tiene alguna verdad. Normalmente, me callo y, a ser posible, me voy a otro lado. Por salud y por economía.

Kerl Hilson


viernes, 16 de marzo de 2012

Con los profesores valencianos


Los profesores trabajarán en julio en la Comunidad Valenciana para formación o clases de refuerzo



No saben nada de educación. No saben cómo es el trabajo de los profesores. No saben lo que quema bregar con alumnos a quienes ellos no han sabido educar en casa. No saben nada de lo que ocurre en las aulas, ni en los hogares, ni en la calle. No saben lo que es dar clase con 40º. No saben tratar a los ciudadanos de otra forma que como súbditos dóciles. Estos catetos, que sólo ven con los ojos del dinero, parece que no quieren que la educación se dé con calidad y les molesta la mera posibilidad de que se haga así. Quieren machacar a los profesores y así, de paso, machacan la cultura. Estos estúpidos, a quienes unos ignorantes suicidas les han dado poder, se proponen triturar cualquier actividad que huela a verdadera libertad, a igualdad, a ciudadanía. Estos bárbaros contemporáneos sólo se soportan a sí mismos. Estos pisacallos pasarán a la historia como un grupo de necios rencorosos y torpes que intentaron acabar, sin conseguirlo, con la noción de ser humano. Señor: perdónalos, porque no saben lo que hacen, pero, mientras tanto, permíteme que los mande a la mierda.



lunes, 12 de marzo de 2012

Mentiras



El ladrón era joven y con aspecto de no cortarse ante nada. Fue en la Puerta del Sol, en Madrid, a plena luz del día, hace ya bastante tiempo. Le quitó la cartera a un ciudadano de forma tan poco trabajada que la víctima se dio cuenta enseguida del atropello. El ladrón, en cuanto tuvo la cartera en sus manos, se la entregó a un cómplice que estaba a su lado, el cual echó a correr velozmente con el botín. El ladrón permaneció junto a la víctima, que reaccionó pronto pidiendo al ladrón que le devolviera la cartera. Éste, lejos de avergonzarse de su acto, al verse interpelado, lo que hizo fue reaccionar a gritos y, con grandes aspavientos y con gestos de estar muy ofendido, le contestó de manera muy ordinaria y cortante: “¿Qué pasa contigo? ¿Es que no ves? Que no te enteras, que yo no he sido, que ha sido aquél que va corriendo por allí. Vamos, decirme a mí que he sido yo... ¿No te jode?” Con lo cual el ladrón, después de robar, con todo el desparpajo, el cinismo y la desvergüenza de los que fue capaz, se inventó una situación nueva con la que tapó la realidad, echándole la culpa a otro de lo que había cometido él.

Me acuerdo siempre de este suceso cuando el PP miente de manera tan descarada y, a continuación, le echa la culpa al PSOE de ser éste el que miente. O cuando se inventa algo sobre el 11 M. O cuando culpa de todo a Zapatero o a Rubalcaba o a cualquiera de sus adversarios, que ellos ven como sus enemigos. Lo hacen con tal naturalidad y destreza que, al igual que ocurrió con el ladrón de la Puerta del Sol aquel día, no me extraña que los ciudadanos menos avisados y menos dados a analizar fríamente los hechos se traguen todas las patrañas que crean con estas maniobras. Es más, algunos en el PP son de mente tan simple que tengo la impresión de que se las creen también.