El
griego, tan importante históricamente en la cultura, para la
Botánica, la Medicina o la Filosofía, actualmente ve relegado su
papel a la publicidad de yogures griegos. Dice un reciente anuncio
que "cada uno en su OIKOS..." Pues sí, oikos
es casa. Oikos se copia en latín como oecus
y da en español eco- (no confundir con eco, repetición de
sonido, de otro origen; el eco de ecografía). De eco -
casa se forma Economía,
oikos - casa y nomos - ley, las leyes de
administrar la casa, de terrible impacto en la realidad del mundo
actual (nótese que economía etimológicamente no tiene nada
que ver con corrupción), y otra importante palabra, Ecología,
el estudio del hábitat, de nuestra casa común, el medio ambiente.
Ecología es palabra acuñada en Alemania hacia 1900. De eco,
significando el todo Ecología, se crean ecosistema,
ecoturismo...
Economía y Ecología acabarán siendo los dos ejes del futuro. Si la
economía no cambia de rumbo, el rumbo de la ecología desembocará
sin remedio en el fin de la vida sobre la Tierra. De oikos
deriva
el verbo oikeo, habitar, del que viene
ecuménico,
que significa lo referido a la tierra habitada, la casa de todos.
Oikos
viene de una raíz indoeuropea, woik/weik, de la que
proviene la palabra latina vicus, barrio. De ahí
viene vecino o
vecindario.
Otra palabra de este origen es villa,
de weik-la o wik-la, casa de campo. De
villa derivan villano,
villanía y
villancico.
DOMUS
es casa en latín. No era el simple edificio, sino un concepto ligado
a la institución familiar, encabezada por el dominus.
Tiene derivados como domicilio,
dominio,
dominar,
don
y doña. Cuando
se dice "señor don...",
es una redundancia, es como decir "señor
señor". Es también origen de domingo,
el día del Dóminus, del Señor; y de doncella
(de domnicilla) y doncel;
y el juego llamado dominó.
También duende,
que proviene de la expresión "duen
de casa", locución cuya primera palabra es forma
apocopada de dueño.
De
esta raíz viene DOMÉSTICO. En principio significa criado de
la casa o animal. Domesticar o domar nos llevaría a la preciosa
escena del Principito y el zorro. El problema arranca de que el
inglés domestic ha alcanzado un significado más
abstracto, afecta en sentido amplio a todo el ambiente familiar o
cercano. Y las traducciones apresuradas o chapuceras nos llevan a
horribles expresiones como "violencia
doméstica" o "vuelos
domésticos", en español incorrectas con el
Diccionario en la mano y extrañas al uso tradicional.
CASA
también existía en latín, pero significaba choza, cabaña. Y casa
se quedará como genérico en castellano, catalán, italiano,
gallego, portugués y rumano, mientras el francés ha elegido maison,
el del doblete español mesón
- mansión. De casa
derivan casamiento,
casino, encasillar y
casamata (en italiano matto es loco, falso).
En portugués se acuña casal, solar, y en Río
de la Plata y Canarias pareja de macho y hembra. Casal
es el apellido del dueño (de dominus, del latín
domus) de este "dominio", de este
blog. La etimología de blog ya la veremos una semana de estas.