La vida o incluso la propia mente nos
invitan a veces a parar, a olvidarnos del mundo y a querernos a
nosotros mismos, para cuidarnos y para recomponernos, pero sin
olvidar que el sentido de todo ello es poder luego querer mejor al
otro y a los otros, para cuidarlos y para recomponerlos.
Buenas
noches.