Si no te despiertas, no te vas a
levantar. Si no te levantas, no te van a ver. Si no te ven, van a
creer que estas muy a gusto o, incluso, que no existes. Si creen que
estás a gusto, van a seguir quitándote la vida poco a poco sin que
tú te enteres, porque estás dormido. Deja que te despierten. Prueba
a vivir despierto. Los demás te necesitamos despierto porque lo
estamos pasando tan mal como tú, sólo que quizá nos demás más
cuenta.