El problema fundamental de la vida es un problema ético.
¿Cómo actuar hoy para crear un mundo más humano?
¿Cómo actuar de manera humana para crear un mundo mejor?
Hay quienes no saben qué es ser
grande, porque no saben qué es estar vivos, ni saben qué es un ser
humano, ni saben qué es ser uno mismo ni una misma, ni saben
descubrir valores humanos ni asumirlos.
Hay quienes podrían ser
grandes si supieran que lo son y que sólo tienen que querer llegar a
serlo.
Los grandes invirtieron siempre mucho
tiempo en su formación. Leyeron mucho y aprendieron todo lo que
pudieron. Intentaron ir creciendo cada día en sabiduría. Procuraron
conocer al ser humano con sus mejores virtudes y sus mayores
defectos. Supieron dar siempre lo mejor de sí mismos. Nunca se les
ocurrió pensar en algo parecido a que el mundo fuese suyo, sino que
lo entendieron como un paraíso que había que construir entre todos
y para todos. Fueron conscientes de la importancia que tenía ser
sensibles. Se pasaron la vida intentando solucionar problemas
antiguos y creando y resolviendo otros nuevos que nos ayudaran a ser
más humanos. En general, fueron seres libres, justos, igualitarios y
generosos. Y también humildes. Todos y todas estamos llamados a ser
grandes.