Dimite el concejal del BNG que llamó “chochito de oro” a la vicepresidenta
Aquí la noticia.
Las cosas están muy mal. Hay cada
personaje que debería estar escondido y lejos de cualquier
responsabilidad pública. No se puede es tratar a nadie,
por muy impresentable que sea, de esta manera. Es como el que cree
que el criminal no tiene derechos humanos o que al que asesina hay
que asesinarlo. No podemos caer de manera tan absurda en aquello que
criticamos. No podemos intentar invalidar a una persona
invalidándonos nosotros mismos. Nuestra ética debe ser la misma en
todos los casos, en los agradables y en los desagradables. Nuestros
actos deben ser siempre ejemplares, especialmente en las situaciones
en las que criticamos algo. Los niveles están muy bajos en casi
todo, pero no debe estarlo nunca en la ética.
Esta noche voy a salir al balcón y voy
a respirar todo el aire que pueda, hasta que me quede por dentro como
un globito. Luego, me voy a tomar una infusión relajante y
calentita. Cuando el cuerpo avise, voy a sacarme de la cabeza todas
las telarañas que esto del vivir produce cada día. Me voy a quedar
sólo con un pensamiento, el que más me guste de todos los que
encuentre, el más bello, el más reconfortante. Con él ocupándome
toda la mente, me voy a poner a repartir cariño a todo el que se me
aparezca por la ventana de la memoria. Todo en clave positiva, con un
optimismo que, si fuera de día, resultara contagioso. Voy a poner a
todo el mundo chorreando de felicidad. Y antes de acabar, me voy a
quedar dormido. Te invito. Buenas noches.
