Vivir la vida alegra al ser humano.
Contemplar la vida intensa emociona. Pero sentir la explosión de
vida humana cerca de ti, con la fuerza irrefrenable que la vida es
capaz de encerrar, es posible que asuste a quien no acaba de
comprender que el gran valor de la vida es vivir, que la gran meta
del ser humano es conquistar la vida en toda la plenitud que su mundo
le permita. Buenas noches.