Es mucho más fácil emitir juicios
inapelables sobre algo de lo que no se tiene ni idea, que esperar
prudentemente a tener suficientes datos, escuchar a todos y dar una
opinión provisional y revisable. Hay quienes son incapaces de
esperar un tiempo, aunque sea breve, sin soltar a los cuatro vientos
lo que creen que es una verdad absoluta que les sale de dentro.
Buenas
noches.