La palabra igualdad produce en algunos un sarpullido mental del mismo grosor que la satisfacción vital que genera en los mismos el concepto de privilegio.
El problema fundamental de la vida es un problema ético. ¿Cómo actuar hoy para crear un mundo más humano? ¿Cómo actuar de manera humana para crear un mundo mejor?
La palabra igualdad produce en algunos un sarpullido mental del mismo grosor que la satisfacción vital que genera en los mismos el concepto de privilegio.
16 de junio de 2016
Creo que soy un privilegiado.
El mundo es una mierda bien grande, pero yo creo que soy un privilegiado.
Cada vez te encuentras por la calle más salvajes, pero yo creo que soy un privilegiado.
Hay muy pocas referencias que te hagan pensar, que te animen a crecer, pero yo creo que soy un privilegiado.
El nivel de brutalidad sube alarmantemente, aunque no se enciendan las alarmas, pero yo creo que soy un privilegiado.
El pasado es sólido, evidentemente, el presente es líquido y el futuro es demasiado gaseoso, pero yo creo que soy un privilegiado.
Creo que soy un privilegiado porque no sé cómo me lo monto, pero soy capaz de sobrevivir a todo esto.
Y porque en casa tengo a quien me quiere y fuera de casa, pero en mi vida, tengo amigos y amigas que me quieren.
Es un privilegio que agradezco y que me ayuda a vivir a pesar de todo.