Hay en Astorga, en la calle Pío
Gullón, 5, un local encantador, en donde puedes tomarte un estupendo
chocolate con churros o un café sorprendente. Se llama Chocolatería
Sonrisas. Dentro, Rocío, Lucía o quien esté te atienden,
lógicamente, con una sonrisa que invita a quedarte un rato, porque
el ambiente que crean es agradable, encantador, relajante.
La última vez que estuve vi en la
pared el cartel que muestro en las fotos. Forman parte de la
iniciativa 'Cafés pendientes', que consiste en que tú pagas tu café
y dejas pagado otro para que alguien que lo necesite y no tenga
dinero pueda tomárselo. Me pareció un detalle grande, propio de
gente buena y que encuentra un marco perfecto en esta chocolatería.
Por lo que he visto allí, nadie va a
Astorga sin pasar por la Chocolatería Sonrisas. Y hacen bien.