Hay que educarlos. Así no se puede
seguir. Ni los padres/madres ni los hijos/as pueden seguir así.
Vamos hacia una sociedad pobre, porque así lo quieren los ricos,
pero también hacia un mundo lleno de brutos, de salvajes, de
individualistas, de ignorantes, de insociables, de mentes vacías que
harán daño sin saberlo. Vamos hacia un mundo invivible, pero este
futuro no está muy lejos. Ya se pueden observar sus primeras
manifestaciones en los servicios públicos. Se están convirtiendo en
algo alejado del trato humano. Tenemos que educarnos o, de lo
contrario, vamos a vivir muy mal.