Al lado de un gran hombre siempre hay una gran mujer y digo al lado, porque si está detrás ya no podemos considerarlo tan gran hombre como nos quieren hacer creer. Y si hay un grande por excelencia, incluso llamado como tal, en el Egipto faraónico ese es Ramsés II, el Grande. Aunque tenía varias esposas, nombró a una Gran Esposa Real y esta se convirtió en un emblema. Ella fue Nefertari. Ambos han representando a la perfección, a lo largo de los siglos, el matrimonio, el amor y el poder...
Puedes leer el artículo de Elvira Martínez Ropero pulsando aquí.