Días de celebraciones y de
manifestaciones en favor de las personas homosexuales, bisexuales,
transexuales y, en general, de todas aquellas que tienen problemas
para vivir su sexualidad con normalidad.
Ponte en su lugar, sobre todo, si eres
heterosexual. Imagina que ir por la calle de la mano con la persona
que amas puede ser causa de que te miren mal o incluso de que te
monten un número o que te agredan. Imagina que una de las más
nobles manifestaciones de cariño, un beso, no puedas darlo en
público con tranquilidad. Imagina que querer a alguien de tu mismo
sexo pueda ser una fuente de problemas por parte de las personas
intransigentes y torpes que no ven más que sus propias narices.
Imagina que tu cuerpo y tu mente no corran parejos en el campo de la
sexualidad. Imagina la lucha constante contra una parte del mundo que
esto supondría. Quizás así podamos entender por qué hay personas
que se sienten orgullosas de su orientación y de su vida sexual
frente a esta caverna intransigente, bruta e inhumana que no les deja
vivir y de la que tienen que defenderse.
Son días para pensar no pensar en
tolerancias ni en permisividades paternalistas, sino en la igualdad,
y para ayudar a que la igualdad pueda vivirse.
Esta noche, cuando acabes de estar
despierto y te hayas relajado bien y estés a gusto, formarás la
nube de cariño pensando en los demás. Que una especie de arcos iris
vista de gala estas noches esa nube. Buenas noches.
