4 de diciembre de 2018
Amamos, y creemos que eso está bien. Odiamos, y creemos también que eso está bien. Nos dejamos llevar por el rencor, y también lo aceptamos. Somos injustos, intolerantes, vengativos, discriminatorios, crueles, falsos o, incluso, estúpidos y no nos queda en la conciencia la menor huella que nos hable de que eso no esté bien.
Todo da igual.