
“Madama Butterfly” fue un problema para Puccini (y un proyecto en construcción). Su fracaso en su estreno en la Scala de Milán en 1904 le llevó reescribir su ópera hasta una quinta versión, estrenada en 1907, la llamada “standard”, que es la que se suele representar hoy día. Es la ópera más triste, la más desoladora, en la que se denuncia la fragilidad de la mujer. El teniente Pinkerton va a llegar, sí, pero para llevarse a su hijo. Cio Cio decide quitarse la vida. Un coro de pescadores, el famoso “Coro a bocca chiusa”, crea un clima lírico, melancólico, reflejando el sentimiento trágico de la protagonista. Un coro sin letra, pero con un significado explícito.