Una de las constantes amenazas a las que nos enfrentamos en la nueva sociedad es el peso del juicio de los demás sobre nosotras mismas: cómo vestimos, cómo actuamos, qué autoestima tenemos y, de forma mucho más general, cómo nos vemos, es decir, cuál es nuestro aspecto, lo que, invariablemente, pasa por el odioso control sobre el peso de nuestros cuerpos. Aunque podría afirmar que este problema solo atañe a las mujeres, en realidad esto ya no es así en la actualidad, sino que tanto hombres como mujeres se ven sometidos a una constante evaluación por parte de sus pares...
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