lunes, 13 de octubre de 2014

Lo que veo cuando miro. El superador



Se te ocurre poner aquí alguna afirmación intrascendente, como, por ejemplo, 'Hace mucho calor', y enseguida sale un espabilado, un superador, incapaz de que se le ocurra una afirmación así, pero que no se priva de decir: 'Mucho, no. Muchísimo'.

Otra vez, viendo lo que hace algún iluminado, escribes que el tal parece tonto. El superador se apresura a matizar que 'Tonto, no. Es gilipollas'.

O, en un ataque de realismo, dices que hay que limpiar la sociedad de corruptos, y el superador no pierde un momento en afirmar que 'Además de limpiar, hay que sacar brillo'.

Parece que siempre hay preparado un superador, al que nunca se le ocurre decir nada, pero que aprovecha todas las oportunidades que se le presentan para afirmar con rotundidad que lo suyo siempre es más. Pues que le aproveche.


Buenas tardes.

Buenos días. Lunes.




Lo malo del lunes es que tiene detrás el domingo, pero lo bueno es que tiene delante toda la vida. 

Buenos días.

Lo que veo cuando miro. Somos de pueblo



Me parece que somos de pueblo y que jamás hemos salido de él. Tenemos una mentalidad pueblerina, cateta, con unos muros enormes en las lindes que nos impiden ver nada de lo que hay más allá de ellas.

Creemos que somos el centro del mundo, lo más importante, lo único que merece la pena. Nos ocurre con el pueblo, pero también, y, sobre todo, con nosotros mismos. No es que nos queramos mucho, es que nos adoramos, hasta el punto de prescindir estúpidamente de todo lo que ocurra más allá de este pequeño pueblo que es nuestro insignificante mundo, nuestra tambaleante vida.

Ni cuando un virus insolente, como el ébola, se atreve a cruzar nuestras fronteras e instalarse en el pueblo, salimos de nuestra estrechez mental y vital. No nos importa que más allá del pueblo, en África, haya más de ocho mil infectados por el virus que llevan la enfermedad en condiciones lamentables. Ni nos apiadamos de un vecino al que las malas condiciones en las que le hacían trabajar hicieron que contrajera la enfermedad. Lo único que deseamos es que no nos toque a nosotros. Lo único que se nos ocurre sentir no es ni solidaridad, ni respeto, sino miedo, esa horrible vomitadura producida por nuestra propia inferioridad, por nuestra pueblerino sentimiento de limitación. Que no me toque a mí, ni a mi familia, ni a mi pueblo. Si le toca a otro, mala suerte. Eso es lo que sentimos sin pensarlo.

Realmente somos de pueblo, cortos de vista, humanamente pobres.


Buenas tardes.

El calendario musical de Bautista. 13/ 10/ 2014. Paul Simon.




Tal día como hoy de 1941 nació Paul Simon

Tienes más información aquí.


Buenas noches. Inutilidad




Hay una forma triste y absurda de morir en vida, que es la inutilidad, pero no por incapacidad ni por falta de oportunidades de demostrar que se es útil, sino por abandono de sí mismo, por la renuncia a seguir aprendiendo, por la decisión de parar de ser, de pararse. 

Buenas noches.

domingo, 12 de octubre de 2014

El calendario musical de Bautista. 12/ 10/ 2014. Gene Vincent.




Tal día como hoy de 1971 murió Gene Vincent

Tienes más información aquí.


Con la música la vida es más humana


Buenos días. Olvidos




Deberíamos no olvidarnos de quienes queremos. 

Buenos días.

Buenas noches. La vida



La vida, por ser vida, debería estar llena de frescura. ¿Por qué, entonces, se nos presenta tantas veces tan espesa, tan acartonada?

La vida, por ser vida, debería ser alegre. ¿Qué hemos hecho para que tantas veces resulte tan triste?

La vida, por ser vida, debería ser una fuente de creatividad. ¿Por qué, entonces, esa rutina contante que nos mata?


Buenas noches.

sábado, 11 de octubre de 2014

Ética para todos. 5. Las normas morales



5. Las normas morales

Las normas morales (las podemos llamar también normas éticas) son aquellas que regulan de manera racional las relaciones de una persona con su entorno, esto es, con las demás personas y también con la Naturaleza, con los animales y con las cosas.

Todos vivimos en el mundo y debemos preguntarnos cómo debe ser nuestra relación con todo lo que nos rodea. Por ejemplo, debemos preguntarnos -y respondernos con argumentos racionales- si podemos explotar o no a las personas con las que nos relacionamos, si podemos usar a los animales para disfrutar nosotros obligándoles a sufrir tormentos, si podemos hacer pintadas en paredes que no nos pertenecen o si podemos quemar un bosque si nos apetece.

La manera de actuar en estas y en otras muchas situaciones viene dada por nuestras normas morales.

Son ejemplos de normas morales:

  • Respetar a las demás personas, porque son también seres humanos, porque todos somos iguales en dignidad y porque yo no soy quién para tratarlos de manera que les cause algún daño.
  • Ser generoso con quienes lo necesitan, porque siempre la ayuda a los demás les hace más felices y les puede facilitar su vida.
  • Mirar las consecuencias de nuestros actos antes de hacerlos, porque así podemos evitar algún daño a las demás personas, a los animales o a la Naturaleza.
  • Educar a los hijos, porque los niños vienen al mundo desvalidos y necesitan la ayuda de la sociedad, especialmente de los padres, para que puedan convertirse en seres humanos.

Como vemos, cada norma moral me la debo justificar yo mismo con razones que me valgan de verdad a mí, aunque no les valgan a otra persona.

El próximo día veremos algunas características de las normas morales. Mientras tanto, puedes pensar si las dos normas siguientes son normas morales o no y por qué.

a) No se debe hablar a gritos en los sitios públicos, como autobuses, restaurantes, etc.

b) Conviene que me duche todos los días.

Si tienes alguna duda, alguna sugerencia o quieres preguntarme algo, no dudes en comentarlo en el blog o enviar un mensaje a mcetica@gmail.com . Te contestaré.


Continuará ...