Hay que buscar. Hay que buscar sin
parar. No debemos conformarnos con lo que tenemos, sea mucho o poco,
sea bueno o regular. Hay una infinitud de vida que encontrar y hay
que seguir buscando. No buscar nos lleva a la soledad, al
aislamiento, a la mediocridad y a la vejez. Vivir es estar buscando
continuamente. Busquemos en lo distinto, en lo diferente, en lo que
no somos. Sólo ahí podremos encontrar lo que nos falta. No basta
con buscar personas, ni mucho menos una sola persona. Eso ayuda a
vivir, pero no es suficiente. Hay que buscar ideas, ocupaciones,
maneras de crear y de crearnos, formas de derrochar toda la energía
que llevamos dentro. Cuando quitan de las escuelas el arte, la
filosofía o la música están formando viejos para toda la vida.
Vivir no es refugiarse en la economía, en el sexo o en la pareja.
Vivir es, además de eso, buscar la creación a través de la
escritura, de la lectura, del deporte, del baile, del juego, de la
pintura, de la música, de la jardinería o de todo lo que suponga
sacar tus energías al exterior. Hay que buscar sin parar para
encontrarte. Y si buscándote, me encuentras, rocíame, si quieres, con cariño.
Buenas noches.
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