Ese imperceptible apretón en el brazo
que es más expresivo que las palabras. Esa combinación de mirada y
sonrisa que hace que la otra persona baje los hombros y que deje de
pensar en que está sola. Ese beso, esa breve caricia en la mejilla
que produce la sensación de que te quieren. Ese abrazo inesperado
que hace que dejes de pensar en tus tormentos. Esa mano en el hombro
que acompaña de manera tan completa. Ese rato que pierden para
interesarse por cómo estás. Ese 'me gusta', que es como un beso
inesperado. Ese dejarte pasar, no porque seas mujer, sino porque eres
un ser humano. Ese ayudarte con el peso de la vida. Ese querer
ayudarte a sobrellevarlo. Ese sentir que te comprenden, que no te
juzgan, que te permiten ser. Ese estar contigo. La belleza de estos
pequeños detalles me lleva a disfrutar de la belleza de la vida.
Ten esta noche, cuando te pueda el
sueño y te abandones a él, el pequeño detalle de acordarte de
todos los que están en tu mundo. Recordar quiere decir, por su
etimología, volver a pasar por el corazón. Hazlo, pero hazlo con
cariño. Buenas noches.
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