LECHE
Es
la primera porque es nuestro primer alimento, somos mamíferos. En
las entregas 32 a 38 de esta serie. allá por noviembre y diciembre
de 2014, escribí sobre el origen del nombre de 39 bebidas, y leche
era la segunda. ¿Hay una más importante? Creo que sí. No, el vino
no. La cerveza, tampoco. ¡Claro, el agua! Copio lo que entonces
escribí: "Leche
(Siglo XII). Del latín lac-lactis.
Es nuestro alimento
básico en la lactancia y después, la de ovejas, vacas... también
forma parte de nuestra alimentación. De lac
derivan lácteo,
lactancia,
lechuga,
lechazo
y lechón.
Lechuza
evolucionaba del latín noctua
a nochuza,
pero sufrió una confluencia con leche,
por la creencia popular en que se echaban sobre los bebés como para
amamantarles, y derivó en lechuza.
Según una teoría hay
una raíz indoeuropea, glak,
origen tanto del latín lac
como del griego γάλα-γάλακτος
(gala-gálaktos),
origen de galaxia.
Hay que recordar el precioso mito sobre el origen de la Vía Láctea
en el mordisco de Hércules niño al pezón de la dormida Hera.
HUEVO
Reconstruyen
una raíz increíble, llena de laringales diferentes, H1oH2wyo.
La desaparición de esos fonemas ha dejado unas secuelas terribles:
en latín ovum,
griego ᾠόn
(oón), galo oi,
inglés egg,
ruso yaye-yatso,
alemán ei,
avéstico aia-aika...
Ovum
se convierte en el castellano huevo,
portugués ovo,
catalán ou,
italiano uovo,
francés oeuf,
rumano ou.
Pero a lo que iba: que compartimos palabra las lenguas indoeuropeas y
que, con los cambios lógicos, todos llevamos miles de años diciendo
"huevo". No quiero ni entrar en la polémica de si avis,
ave, y ovum,
huevo, son formas derivadas o no de una misma raíz. Tampoco quiero
repetir lo de la diptongación de ovo
> uevo,
y la h
por convención ortográfica, como hueso,
hueco...
Derivados de huevo son oval,
óvalo,
óvulo,
ovario.
Huevón
se usa mucho en América, con muchos matices de cariño o de insulto,
en distintos países, de México a Chile, hasta evolucionar a un
simple "on",
mezclado en la conversación, en las calles de Lima, como el che de
los valencianos.
MIEL
He
encontrado en Internet una lista de treinta lenguas que dicen miel
de forma similar. Es una de las raíces más resistentes, mejor
conservadas. La apicultura es más antigua que la agricultura,
pertenece a la época del hombre recolector. Hay constancia
arqueológica de época preneolítica, y una famosa pintura rupestre,
en Bicorp, Valencia, de una figura humana catando una colmena, datada
en 8000-10000 a. C, y pintadas las abejas, es preciosa. Hay dos
raíces indoeuropeas, la de las lenguas indoeuropeas occidentales,
latín mel,
griego μέλι
(meli), albanés mjal,
celta mel,
irlandés mil,
inglés mildew,
etc. y otra raíz, de las lenguas orientales, sánscrito madhu,
ruso med,
lituano medus,
avéstico madu,
armenio mghr,
griego μέθυ
(mezy) . El griego es el único que comparte las dos raíces. Esta
escisión es muy interesante para los investigadores, a nosotros con
observarla nos basta. En castellano el latín mel
ha diptongado en miel,
y tiene derivados como mermelada
(mellimelu
> marmelo
> marmelada),
membrillo
(melimellum
> memirellu
> memriellu),
caramelo
(de canna
mellis,
caña de miel, según una de las teorías, hay otras). En castellano
y francés miel,
portugués y catalán mel,
italiano miele,
rumano miere.
Leche,
huevo
y miel,
parece que estuviera haciendo un bizcocho.