ESPALDA
Del
griego spathe,
pala, el latín creó spatha.
En castellano aparece espada
en el s. XI con el significado actual de espada
y con el primario de pala del tejedor, y el diminutivo spáthula
evolucionó a espalda,
que primero significó palita, luego por comparación omóplato y
finalmente la espalda entera. El omóplato antes se había llamado
scápula,
de ahí que el adjetivo, siempre conservador, sea escapular
(y de ahí, escapulario).
Los omóplatos son dos, por eso se dice "las
espaldas".
El catalán espatlla,
portugués espádua,
italiano spalla
designan solo la parte trasera de los hombros, incluso el francés
épaules
designa solo los hombros. Pero el castellano espalda
y el rumano spate
designan toda la parte dorsal. Derivados son respaldar
y espaldarazo.
La raíz indoeuropea spe
es origen de spes,
esperanza, espasmo
y próspero.
SOBACO
Es
una palabra de origen incierto, restringida al castellano,
gallego-portugués y gascón. Su sinónimo culto es axila,
del latín axis,
eje, porque es el punto de articulación que funciona como un eje.
COSTADO
Deriva
del latín costa,
costilla. Costa
(s. XIV), en su significado de orilla del mar, entró en el
castellano procedente de otras lenguas hispánicas de zonas costeras.
Por eso no diptongue la o
> ue.
Pero en su significado de ladera de la montaña, cuesta,
está en el castellano desde el s. X, y con diptongo. Tuvo otro
significado primitivo, espalda, que se conserva en la expresión "a
cuestas"
y en costal.
Derivados importantes son acostarse
y recostarse.
CINTURA
Del
verbo latino cingere,
ceñir. Y cinturón,
cinto
y cinta,
cincho,
cimbra,
el armazón de maderas para construir un arco, recinto,
precinto
y sucinto,
cíngulo
y ceño,
aro que rodea. Es raíz compartida con otras lenguas indoeuropeas, en
lituano kinkau
es enjaezar al caballo. Aunque en origen es lo que ciñe, en cintura
acaba siendo la parte del cuerpo que es ceñida. Ya hemos hablado un
día de encinta
(24-VII-15), que puede significar desceñida o ceñida.
NALGAS
En
latín era natis,
aunque siempre se decía en plural, nates,
porque las nalgas son dos. Pero lo que pasó al castellano fue la
variante vulgar nática.
Esta por evolución normal dio nadgas,
y así se dijo hasta 1400, cuando el castellano adoptó la forma
astur-leonesa nalgas.
CULO
Del
latín culus-culi.
No plantea ningún problema fonético, su evolución es normal, hasta
llegar al culo.
Está datado en castellano en 1155. En portugués e italiano, culo,
en catalán y francés, cul;
en euskera, ipurdi.
Tiene derivados no malsonantes como culata,
culera,
culada,
recular
o culotte,
pero la enorme riqueza de derivados y compuestos pertenece al campo
de lo coloquial: tapaculos,
un fruto silvestre, rapaculos,
un insecto muy corriente también llamado cortapichas, lameculos,
culichichi,
peyorativo en Canarias, pero afectivo en Cádiz, culón,
culear,
culero.
Hace un tiempo el deslenguado Berlusconi se refirió en privado a la
Merkel como esa culona
inchiavabile,
algo así como esa culona con la que sería imposible tener sexo. La
raíz indoeuropea keu,
con un significado de cubrir o esconder, se encuentra en multitud de
lenguas con distintos significados especializados: tejado, cabaña,
escondrijo, vaina; y en irlandés cul,
culo. Esta raíz ha generado cutis,
oscuro,
cunnus,
coño, y en griego kytos,
cavidad cerrada, de donde se creó cito,
con significado de célula, que forma citoplasma,
fagocito,
leucocito...