Cada minuto eres libre y responsable de
tus actos. No hay nadie que te pueda quitar ni tu libertad ni tu
responsabilidad, salvo que sea un dictador más o menos enmascarado.
Ideas, vestidos, cortes de pelo, elecciones, aborto, eutanasia,
críticas, aplausos: todo esto y más debe ser objeto de tu libertad
y de tu responsabilidad. Y de nadie más.
Buenas noches.