lunes, 12 de agosto de 2013

Buenos días. Algo nos faltó





Me quedé sin darle un beso a María. Vi que llevaba su brazo totalmente tatuado. Le vi también tatuajes en un muslo. Vi su mirada. Me pareció llena de inteligencia y de ternura. Le dije que ya nunca se podría desnudar del todo, que siempre llevaría sobre su piel el tatuaje que la vestía. Me contestó que se tatuaba para desnudar su alma porque en su piel estaba escrita su vida, todo lo que para ella era importante. Me quedé pensando. Se quedó pensando. Nuestras sorprendidas miradas se encontraron. Yo sentí la vida por dentro. Nos faltó un abrazo, un beso. La estética dejó paso a la vida, a la fortaleza galopante y sorprendente de la vida. Buenos días.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Puedes expresar aquí tu opinión.