La simpatía creo que consiste en acompañar el cruce de miradas con una sonrisa, en tener una palabra amable de vez en cuando intentando ayudar a que los otros consigan lo que quieren, en aprendernos el nombre de quien nos habla, en aparecer siempre como disponible por si necesitan algo de nosotros, en expresarnos de manera cariñosa cuando aparece alguien a quien conocemos, en tener un detalle con la otra persona, aunque sea a costa de algo nuestro, en mostrarse siempre cercano, en procurar que la frescura que una persona simpática tiene siempre en su mente se contagie a las personas con las que está. Etimológicamente, simpatía significa sentir con la otra persona.