Todo parece en calma. Casi me atrevería
a decir que todo está en calma, que todo está en paz, pero es
falso. Lo que observo no es más que una mera apariencia. En
realidad, todo está continuamente cambiando. Todo está yendo a más
o a menos. Todo está en guerra consigo mismo o con lo demás. La
guerra, con sangre o sin ella, está en el mismo centro de la vida.
No existe la paz.
Buenas noches.
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