martes, 22 de junio de 2010

Ánimo


El tipo tan delicado, simpático y elegante que me vende cada día el periódico me volvió a despedir el otro día con ese gruñido contemporáneo que distingue a los seres antropomorfos y que suena “vengaaaaa”.

En medio del frío y de las nubes de un lamentable día de otoño en primavera, un tipo asqueroso me ha obsequiado al pasar a su altura con unas toses emitidas asquerosamente sin taparse la boca, con lo que me he visto obligado a esquivar sus efluvios, como si tuviera que evitar el impacto de una bofetada en la cara.

He subido al autobús y había tal algarabía allí dentro que parecía más bien un mercado en horas punta. No pude leer el periódico a gusto.

Me he sentado a escribir este texto en el aula en la que nos permiten estar a los profesores de apoyo en las PAU y he tenido que defenderme de uno de ellos, que estaba absolutamente desocupado y que se ha dedicado a pasear observando lo que hacía cada cual, como si se tratase de vigilar un examen.

Me he traído el paraguas y está empezando a salir el sol.

Es uno de estos días en los que hay que reaccionar ante las circunstancias y buscar energías positivas en algún lugar en el que puedan estar escondidas y procurar vivir con buen ánimo, aprovechando lo mejor posible las veinticuatro horas que nos depara este día.


lunes, 21 de junio de 2010

Catedráticos


Lo bueno que tiene el Mundial de fútbol es que te metes en cualquier bar a tomar un vino y, como estén dando un partido, aparece un nutrido grupo de catedráticos que, al no estar reconocidos ni por Harvard ni por su cuñada, necesitan hacer ver ante la multitud de la media docena de parroquianos de la barra sus amplios e incontestables saberes. Los hay de Estrategias infalibles, de Tácticas goleadoras eficaces, de Sistemas de entrenamientos mucho mejores, de Lo que tenía que haber hecho y de Ya te lo había dicho yo mucho antes. Suelen salir a la luz cuando más falta hacen a la causa, esto es, cuando pierde el equipo que se esperaba que ganase. Haz la prueba. Si esta noche empieza a perder España –ojalá el destino no lo tenga contemplado así-, sal rápidamente a la calle y entra en cualquier bar. Seguro que ves allí a todo el Claustro reunido y emitiendo informes definitivos para salvar la situación. Es lo que tiene el fútbol.


domingo, 20 de junio de 2010

sábado, 19 de junio de 2010

viernes, 18 de junio de 2010

Saramago ha muerto



La noticia es de esas que se esperan en cualquier momento, aunque yo creía que tenía más que los 87 años que ahora han salido a la luz. Pero, como todas esas noticias lamentables, absurdas y no queridas, la de la muerte de Saramago me ha sorprendido y me ha dejado un poco (más) huérfano. Me gustaba la lucidez que tenía para ser un pesimista y el coraje del que hacía gala para pensar, escribir y actuar como si no lo fuera. Era uno de esos casos inhabituales de personas con la suficiente calidad en la mirada como para escribir con sentido advirtiéndonos del peligro de la ceguera colectiva. No me extrañó nunca que cierta gobernanta inculta, condesa y ordinaria, que llegó a ser Ministra de Cultura, lo confundiera con Sara Mago. Su punto de vista era siempre atinado, sensato, directo, arraigado en un pensamiento social, nada egoísta e independiente. Para mí, en realidad, era uno de los referentes en la vida, no tanto por sus novelas, sino por sus artículos y por sus entrevistas, porque era un modelo, y un modelo es siempre algo más que las copias o las reproducciones que de él se hacen. Por decirlo de la manera más sintética posible, era un verdadero ser humano. Gracias, Saramago, por haber existido.


La vela


“Cuando el cansancio echa sus raíces en ti, las negras sombras de las más espesas nubes hacen que se oscurezca el paisaje, que no parezca apetecible el futuro y que la vida se confunda con una especie de estrecho y movedizo puente colgante que no se sabe muy bien por qué hay que atravesar.

Pero tú eres fuerte y sabes que casi todo es pasajero, que siempre se puede encender una vela que dé un poco de alegría y que no suele pasar tanto tiempo para que vuelva a salir el sol”, le dije hoy al del espejo mientras me afeitaba.


martes, 15 de junio de 2010

Piratas


Me causan terror los detalles que vengo observando recientemente entre las fuerzas con poder en este país.

Por una parte, los sindicatos. ¿Cómo es posible que antes de conocer el texto definitivo de una reforma laboral, que puede sufrir cambios en el proceso de discusión en el Parlamento, se decidan a convocar nada menos que una huelga general? ¿Creen los sindicatos en la situación actual una huelga general es lo que mejor le va a venir al país? ¿Qué es lo que buscan? ¿Se trata de hacer justicia o de abordar el barco contrario como sea?

Por otra parte está lo que he leído en El País del domingo 13 de junio. En un artículo titulado Rajoy pretende el aval del poder financiero, firmado por Carlos E. Cué, aparece lo siguiente:

“El objetivo del PP es claro y nadie, tampoco Rajoy, lo oculta: lograr que no se aprueben los presupuestos (…) y Zapatero se vea obligado a convocar elecciones anticipadas en 2011.”

Pero ¿de qué se trata, de sacar al país adelante o de llegar al poder como sea? ¿Cómo es posible que un partido político en una sociedad democrática esté en contra de unos presupuestos generales sin conocerlos? Y lo mismo ha dicho el cada vez más alterado, nervioso y ordinario Durán Lleida. ¿Es esto razonable? ¿En esto consiste la política? Quizá es que sean algunos políticos ...

No veo más que piratas que intentan asaltar barcos, por si acaso alguno de ellos contiene poder, como sea. Vale todo.


lunes, 14 de junio de 2010

Necrofilia


Moisés Naím es un escritor venezolano, editor de la prestigiosa revista Foreing Policy y comentarista habitual del diario El País. En la edición del domingo 6 de junio de 2010 publicaba una columna titulada La necrofilia ideológica en la que hacía ver la afición de ciertas personas por defender ideas muertas. El artículo comenzaba así:

La necrofilia es la atracción sexual por cadáveres. La necrofilia ideológica es el amor ciego por ideas muertas. Resulta que esta patología es más común en su vertiente política que en la sexual. Encienda su televisión esta noche y le apuesto que verá a algún político apasionadamente enamorado de ideas que ya han sido probadas y han fracasado. O defendiendo creencias cuya falsedad ha quedado demostrada con evidencias incontrovertibles.

Tras comentar algunos ejemplos, como los del maoísmo, las izquierdas sudamericanas, los fundamentalistas del libre mercado, los que se empeñan en negar validez a la teoría de la evolución o en defender la mutilación genital femenina, terminaba de esta manera:

En el fondo, los necrófilos políticos aman más el poder que las ideas con las que manipulan a sus ingenuos seguidores.