Se me ha movido mucho últimamente el mapa bajo los pies, quizás demasiado. Han variado con frecuencia el paisaje y la circunstancia y cuando los decorados cambian tanto, se termina por no saber bien ni el papel que uno tiene ni la obra que representa. Habría que parar un poco el mapa y pararse uno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Puedes expresar aquí tu opinión.