sábado, 4 de abril de 2015

Buenas noches. Llegar tarde




Hay que evitar llegar tarde a la vida para que no tengamos que hacer a los 40 lo que deberíamos haber hecho a los 20, ni a los 70 lo que no hemos hecho nunca. 

Buenas noches.

Buenos días. Importancia




Lo que tú haces es tan importante como lo que hacen los demás. 

No lo hagas de cualquier manera. 

Buenos días.

Andréi Tarkovski. El Calendario Cultural de Bautista. 4/ 4/ 2015.



Tal día como hoy de 1932 nació Andréi Tarkovski

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viernes, 3 de abril de 2015

Buenas noches. Querer llevar la razón




Hablan a gritos, pero no dicen nada que tenga un mínimo de interés. Se observa en el autobús, en el bar, en los mítines, en las tertulias y en cualquier sitio en donde no se pretenda la reflexión, sino esa nefasta manía tan extendida de querer llevar la razón como sea. 

Buenas noches.

Buenos días. Tristeza




No cedas ni un momento ante la tristeza. 

Si te dejas, te gana. 

Buenos días.

Ética para todos 28. Cada cual tiene su ética, pero ...



No sé si habrás observado que en las reflexiones que venimos haciendo sobre las diferentes normas que vamos proponiendo, solemos argumentar usando expresiones tales como 'yo creo que …', 'a mí me parece …' o similares.

Considero que es importante parar un poco para explicar este asunto.

Las normas morales no son, en principio, universales, esto es, que no tienen por qué ser aceptadas y cumplidas por todo el mundo, sino que es posible que lo que yo considere que es una norma moral tú no lo consideres como tal.

Una norma moral no es un capricho de nadie, ni mío ni tuyo. Es una forma de actuación que -y esto es lo importante- debe ser razonable para quien actúa. Si yo voy a hacer algo, debo ser yo quien me lo justifique con razones, con argumentos, pero puede que a ti estos argumentos no te valgan, y estás en tu derecho. Por ejemplo, podría darse el caso de que para mí fuera aceptable y razonable ir al Museo del Prado vestido con un chándal y que para ti no lo fuera, porque lo consideraras una falta de respeto. O viceversa. Las normas morales, son por tanto, subjetivas, pero tienen también que ser argumentadas racionalmente por cada uno. No vale refugiarse en la subjetividad para que cada uno haga lo que le dé la gana.

No hay que olvidar, sin embargo, que tampoco somos tan distintos y que aunque la razón siempre funciona ligada a un contexto, lo habitual es que razonemos de manera muy parecida, que nos basemos en valores muy similares y que, en condiciones normales, pensemos que son buenas las mismas normas. Lo cual no implica que, en nombre de la moral, podamos imponer a una persona ninguna norma, si ésta no está convencida de que tal norma es buena.


Las normas que nos damos marcan nuestra forma de vida y esto es algo que debemos plantearnos personalmente cada uno, sin perder de vista que somos seres que vivimos con los demás en un mundo. Y esto también cuenta y mucho.

Marlon Brando. El Calendario Cultural de Bautista. 3/ 4/ 2015.




Tal día como hoy de 1924 nació Marlon Brando

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Los viernes, etimologías. Mercado, merced, usted.



MERCADO

Sostienen los estudiosos que merx-mercis es una palabra de origen etrusco. No es una raíz indoeuropea, no se detecta originalmente en ninguna lengua hermana del latín, aunque después haya pasado, por ejemplo, al inglés, market. Los etruscos estaban allí, en el centro de Italia, eran la cultura dominante, cuando un pequeño villorrio, Roma, comenzaba a crecer y ser importante, una pequeña ciudad campesina, que admiraba la gran cultura de sus vecinos. Y al final Roma se engulló a los etruscos. El origen de la lengua etrusca es muy oscuro y muy debatido. Podría ser una lengua aislada y, como la lengua de los íberos, está rodeada de hipótesis y teorías. Pero era la lengua de prestigio de la vecina de al lado, cuando nacía la cultura latina. Es un caso similar al del euskera para el naciente castellano en los valles de la Castilla del Norte. Muchas costumbres, usos religiosos y palabras fueron absorbidas por Roma, y, lo más importante, el alfabeto en el que estoy escribiendo yo ahora, el que llamamos alfabeto latino, el más utilizado en el mundo, se basa en el alfabeto etrusco (y este en el griego). Es, pues, normal que el latín tuviera palabras de origen etrusco como mercado, persona o satétite, y nombres propios como Antonio o Sergio.

Merx-mercis, mercancía, es el origen de mercado, mercería, comercio, mercader, mercantil, mercante, marchante, mercachifle y mercenario. De la misma raíz es Mercurio, dios del mercado y, ojo, de los ladrones. Qué avispados los romanos, que ya asociaron "los mercados" (esos que hoy gobiernan el mundo, sin haberles votado nadie) con el latrocinio.

MERCED

Es de la misma familia, y en principio significaba recompensa, pero en castellano acaba significando favor, lo que alguien te otorga generosamente, aunque el refrán diga que "favor con favor se paga". Llega a ser el nombre de una Virgen, la Mercé, patrona de la ciudad de Barcelona, es apelativo de Enrique II el de las Mercedes, un rey de Castilla y León allá por el s. XIV, el que mató a su hermano Pedro el Cruel en una guerra civil, y da nombre a un conocido automóvil alemán, Mercedes Benz, por el nombre de la hija de un importante cliente de Benz. Pero volviendo a merced, la palabra tiene una gran fortuna, forma la preposición "merced a", es la raíz de los Mercedarios, orden religiosa a la que perteneció el gran Tirso de Molina, de la fórmula francesa merci para dar las gracias y, a través de Vuestra Merced, es el origen de la palabra usted.

USTED


Parece mentira, casi hay que hacer un acto de fe para creer que usted es la contracción de Vuestra Merced. Pero están documentados montones de pasos intermedios, usarced, voacé, vuasted 1617, vuested 1635, vusted 1619... Dicen que surgió por desgaste de vos como tratamiento de cortesía. Es similar a vuecencia por vuestra excelencia o usía por vuestra señoría. Pues habrá que creerlo, mire usted.

jueves, 2 de abril de 2015

Buenas noches. No me gusta




Una de las cosas que no me gusta de este mundo. He entrado en un bar. Uno de los camareros está enfermo. Tiene escalofríos. Le duele la garganta. Tiene mala cara. El encargado del bar está del otro lado de la barra, entre el público. Como si nada. Ni se le ocurre decirle que se vaya a casa y que el lo sustituye. Parece que como él es el encargado, no trabaja. 

Vuelvo al día siguiente. El camarero sigue allí. Dice que se siente mejor, pero le sigue doliendo la garganta. El encargado sigue también allí, entre el público. Ignoro si algún compañero de los que libran se ha ofrecido a cambiarle el día o no. Un trabajador enfermo tiene que aguantar una jornada de muchas horas de pie, enfermo. No sé qué le podría ocurrir si se queda en casa a curarse. 

No me gusta un mundo así. 

Buenas noches.