BEYONCÉ ha dinamitado el mundo del country, ya muy convulso en la era Trump, con un álbum en el que reivindica el origen negro del género. Ella texana y negra. Versiona el Blackbird de The Beatles (1968), usando en la instrumentación del original, con la aquiescencia de Paul McCartney, y el famoso ritmo con el pie en el suelo. Es una canción mítica, ya desde su nacimiento fue una proclama antirracista.
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