miércoles, 4 de diciembre de 2013

Buenas noches. Estar, pero no ser





Se puede estar y no ser. Hay veces que nos movemos, pero no estamos vivos. Son esos momentos en los que las palabras sólo son letras o sonidos, pero no forman mensaje. O esos otros en los que los besos no transmiten el cariño, la mirada ni pregunta ni dice, la sonrisa se ha enfriado y las manos sólo sirven para transportar pesos. En esos momentos apagados, el paisaje está callado, el arte se oculta, los cuerpos se convierten en carne y la existencia se vuelve indiferente. Hay que salir urgentemente de ahí como sea. Buenas noches.

Buenos días. Entusiasmo





Unas gotas, sólo unas gotas, de entusiasmo son capaces de convertir el brebaje en un cóctel. Buenos días.

El calendario de Bautista. 4/12/2013. Karen Horney




Tal día como hoy de 1952 murió la psicoanalista Karen Horney

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Buenas noches. El pequeño gran detalle





No tiene por qué ser algo espectacular, ni caro, ni raro. Las personas buenas -y, también, las personas mayores- suelen tener un alma de niño y disfrutan con pequeñas cosas. Deberíamos mostrar la grandeza de tener pequeños detalles con ellos. Con frecuencia son personas generosas y, aunque la generosidad se ejerce a fondo perdido y sin pedir nada a cambio, es muy humano hacerles ver de vez en cuando que la vida también se acuerda de ellas. Buenas noches.

martes, 3 de diciembre de 2013

Lo que veo cuando miro. Criticar





Me parece que tenemos que aprender a criticar. La palabra 'criticar' viene del verbo griego krinein, que significa 'separar'. Someter algo a crítica significa separar lo bueno de lo malo que hay en eso que se critica. Ser una persona crítica no es ir sistemáticamente en contra de todo ni de todos. Esta actitud está más cercana a la intransigencia o a una especie de desahogo que de una intención verdaderamente crítica. Para criticar hay que empezar por analizar aquello que se critica, esto es, hay que procurar ver todos los elementos que forman lo criticado. Sobre ellos se trata de ver en qué consisten y de aventurar sus consecuencias y las que tendría lo contrario de lo que se critica. El proceso de crítica termina en un juicio argumentado, en el que se resaltan los aspectos positivos de lo que criticamos, justificándolo con argumentos, y los elementos negativos, igualmente argumentados. No son buenos ejemplos de una actitud crítica ni la negación sistemática y constante de todo lo que diga el adversario, ni las generalizaciones del estilo de 'todos son iguales', 'fuera todos', ni el confundir una parte con el todo, ni el sacar fuera de un contexto un hecho, ni el llevar la contraria de forma llamativa sin sopesar las consecuencias que esa actitud pueda tener. Es muy difícil hacer una crítica seria, sobre todo en tiempos de crisis. Buenas tardes.

Buenos días. Como si fuera inmortal





Vive cada instante como si fuera inmortal. Lo que hagas, hazlo como si quisieras que durara siempre. Sólo así mejorarás tú y mejorará el mundo. Buenos días.

El calendario de Bautista. 3/12/2013. María Izquierdo




Tal día como hoy de 1955 murió la pintora María Izquierdo

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Música para la madrugada. Romantic Saxophon


lunes, 2 de diciembre de 2013

Lo que veo cuando miro. Coherencia





He oído hablar mucho estos días de coherencia. Esta es una de esas palabras que me dejan un tanto intranquilo, cosa que también me ocurre con ciertos usos del término 'auténtico'. Cuando dicen de alguien que es 'muy auténtico', queriendo afirmar con ello algo positivo, me quedo un tanto perplejo, porque no acierto a entender lo que quieren decir. Creo que se puede ser un auténtico artista o un auténtico estúpido, pero ser sólo auténtico no sé lo que puede significar.

Lo mismo me ocurre con eso de ser coherente. Creo que ser coherente es algo así como ser consecuente con lo que se piensa. En este sentido, por poner un ejemplo, el PP es muy coherente. Piensan sus miembros que la mentira es útil y por eso mienten; creen que sólo ellos son dignos de respeto y por eso maltratan a los demás; defienden que todo vale y por eso actúan como lo hacen. Es verdad que muchas veces no hablan de acuerdo con lo que piensan, pero ellos creen que pueden hacerlo y por eso lo hacen. Son coherentes a su manera.

Me parece a mí que el valor real de un político no está tanto en su coherencia, sino en la eficacia de sus actos, en las consecuencias que pueda tener su gestión, siempre que se sitúen dentro de un marco aceptable de acción.

No tengo yo muy claro que negar la viabilidad de un pacto, como ha hecho recientemente el senador Tomás Gómez, por ser coherente con unas ideas defendidas por él sea una acción muy acertada políticamente. Tengo dudas sobre esto. Todo pacto implica una concesión, una renuncia a algunas ideas propias. Si no se admite esto, estamos negando la posibilidad de que existan pactos, acuerdos, y con ello la posibilidad de organizar la vida de manera que quepamos todos. En cierto modo, se está renunciando a la política y se está actuando como suele hacerlo el PP: o se hace lo que yo quiero o no se hace nada. No creo que sea esta actitud lo que necesitemos actualmente, sobre todo cuando crece el deseo de que se rompa el bipartidismo y se tengan que establecer gobiernos de coalición, que no sé cómo se podrían lograr con esa actitud. Tengo la impresión de que en algunas ocasiones una explicación bien clara de lo que se pacta y de por qué se pacta tiene más valor que una acción testimonial. Buenas tardes.

Buenas noches. Ganas de vivir





El único asunto realmente importante es si tengo o no tengo ganas de vivir. Ya lo dijo Camus refiriéndose al suicidio, pero esto hay que verlo de manera un poco más estimulante.

La razón nos ofrece argumentos, pero, como siempre, es la voluntad la que decide, la que es capaz de arrastrarnos hacia el sí o hacia el no. En la decisión de la voluntad intervienen esos argumentos racionales, pero también los sentimientos, las emociones, las experiencias vividas y muchos otros elementos, de algunos de los cuales no tenemos conciencia. En todo caso, la decisión es inevitable.

Si lo que resulta es que no tienes ganas de vivir, te haría un ser noble si procuraras, al menos, no molestar. Y si realmente tienes ganas de vivir te sugiero que consideres que vivir es actuar, no estarse quieto. Es construir el mundo, crear relaciones, inventarte a ti mismo cada día. Es involucrarte en la felicidad de los demás, empujar a la justicia para que gobierne el mundo. Es hacer que la generosidad y la solidaridad se apoderen de ti. Es gastarte, cansarte, confiar y … esperar. Buenas noches.