Me gustaría darle las gracias a todas
aquellas personas que durante este año me han aportado algo útil o grato. Se
trata de vivir dando lo mejor de uno y muchas personas lo han hecho
conmigo. Unas, de forma más cercana y directa, como los amigos y las
amigas, que me han dado su cariño, su tiempo y su alegría. Otros,
de forma aparentemente menos personal, pero igualmente sentida por
mí. Son todas aquellas personas que se han cruzado en mi vida y que
han hecho que la felicidad se acerque. Quiero citar, entre ellas, especialmente a
quienes desde el arte me han hecho ver que la vida es deseable. No
entiendo la vida buena y humana sin el arte en cualquiera de sus
manifestaciones. Desde la fotografía, la música, la pintura, la
literatura y, sobre todo, el teatro he vivido momentos de gozo, de
reflexión, de humanidad analizada y comentada, de belleza
sobrecogedora. Siempre he pensado que si en este mundo hay que ver lo
que hacen algunos y escuchar lo que dicen, esos son los artistas.
Gracias a todos ellos y a todas ellas y que el año venga bueno y
deseable. Buenas noches.