jueves, 17 de enero de 2013

Alguien debería decir... Comer




Alguien debería decirnos que comer no es tragar ni atiborrarse de comida, sino alimentarse conveniente y razonablemente, además de llevar a cabo una función social, en la que hay que procurar que los que te acompañan en la comida estén a gusto. Comer es, como todos, un acto humano.

Amor 36





Las personas, las cosas, las ideas, todo se puede amar. Todo se debe amar.

Buenos días. Mi



Mis zapatos. Mis ideas. Mi pareja. Mi opinión. Mis padres. Mis amigos. Mis aficiones. Mi casa. Mi manera de vestir.

¿Quiere o no quiere decir lo mismo “mi” en cada una de estas expresiones?

El calendario de Bautista 17/1/2013. Lola Montez




Tal día como hoy de 1861 murió la actriz y bailarina irlandesa Lola Montez. Tienes más información aquí.



miércoles, 16 de enero de 2013

Alguien debería decir... Los mejores




Alguien debería decirnos a todos que a la hora de actuar, siempre deberíamos hacerlo como si fuéramos los mejores profesionales, los mejores amigos, los mejores seres humanos. Todo lo demás es ir perdiendo la dignidad, no tratar a los demás como se merecen y rebajar la propia humanidad a niveles difícilmente justificables.

Amor 35





Cada cual encuentra en el amor lo que pone antes.

Buenos días. Éxito




Cuanta menos valía humana tenga el individuo, parece que es mayor el éxito que necesita conseguir. Conocí a rancios profesores que necesitaban grandes auditorios llenos de gente para que le encontraran sentido a lo que hablaban. También he conocido a otros que se contentaban con tener a alguien que les escuchara. Eso ya era muy importante para ellos. Creo que lo que cada cual entiende por éxito es muy revelador de su propia personalidad.

El calendario de Bautista 16/1/2013. Susan Sontag



Tal día como hoy de 1933 nació la escritora norteamericana Susan Sontag. Tienes más información aquí.



martes, 15 de enero de 2013

Alguien debería decir... Chistosos sin gracia




Alguien debería decirle a quien no tiene gracia, pero insiste en hacerse el gracioso con chistes de dudoso gusto y chascarrillos más o menos desafortunados, que lo primero es el respeto, el saber estar, el no usar a las personas que son diferentes (homosexuales, mujeres, prostitutas, enfermos, tartamudos, etc.) para decir tonterías e intentar así satisfacer su maltrecho ego. Son pesados, faltones y cansinos como sólo ellos son capaces de serlo.

Lo que no entenderá Güemes




He oído decir al Sr. Güemes, cuando ha hablado de que dejaba su puesto en el Consejo de Unilabs, que creía haber perdido algo de libertad en la defensa de sus ideas y de sus profundas convicciones. Yo creo que esto lo ha aprendido -si es que lo ha aprendido- el Sr. Güemes, a la fuerza, porque no ha tenido más remedio o porque ha sido obligado desde algún foco de poder político o empresarial. En todo caso, parece que esto lo dice el Sr. Güemes porque para él el valor supremo -y, quién sabe, si único- es el de la libertad, entendida como una capacidad individual de hacer lo que le dé la gana, sin mirar las consecuencias para los demás ni, por lo que se ve, para él mismo. Lo que le faltaría al Sr. Güemes por aprender es que en muchas ocasiones hay que renunciar a algo de su adorada libertad porque, por encima de ella, están la igualdad y la justicia, por encima de su excelsa persona está la colectividad, y por encima de la política y del dinero, está la ética. Pero dudo mucho de que el Sr. Güemes sea capaz de entender estas cosas, porque es como si perteneciesen a un idioma que no hubiera hablado jamás.