“E lucevan le stelle” es mi aria favorita de toda la historia de la ópera. El protagonista de “Tosca” (1900), Mario Cavaradossi, en la prisión del castel de Sant´Angelo espera ser fusilado al amanecer. En su mente se agolpan los recuerdos (“O dolci baci, o languide carezze”) y la angustia ante la cercana muerte (“Non ho amato mai tanto la vita”). La genialidad de GIACOMO PUCCINI consiste en alcanzar esa fibra del sentimiento que nos conmueve a todos. Todos
tenemos recuerdos de amor, todos estamos enfrentados a la muerte. Todos somos Cavaradossi.
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