LEK – LEG.
Esta es una de las raíces más ricas y
productivas de todo el Diccionario. Es una profunda raíz
indoeuropea, y se puede detectar en las lenguas germánicas. En
general significa re-coger, re-co-lec-tar (palabras que ya contienen
esta raíz). Después cada lengua la usa con matices.
En latín LEGO significa
leer, elegir. Y de él vienen lec-ción, lec-tura, atril (de
lectorile); e-leg-ir, e-lec-ción, co-lec-ción; leg-ión
(de legere, reclutar), di-lig-encia, neg-lig-encia e
inte-lig-encia
(así la inteligencia, de intelligere,
etimológicamente es la capacidad de coger, de elegir inter, entre distintos aspectos u opciones);
ley, leal y legal (que son la misma palabra por derivaciones paralelas), leg-ítimo, leg-islatura,
leg-islador y toda su familia (me refiero a la familia léxica, no a la familia sanguínea, la de los
enchufes y privilegios), privi-leg-io, flori-leg-io, sacri-leg-io y sorti-leg-io; leña (de lig-no,
madera que se recoge); leg-ar, co-leg-io, co-leg-a, de-leg-ado, re-leg-ar, etc.
Coger viene de col-lig-ere,
derivado de lego, y tiene en Hispanoamérica el
significado malsonante de joder, follar, del acto sexual. Al
fin y al cabo la elección sexual es una elección muy importante, que hacemos en su momento. Había en
latín un di-lig-ere, amar, del que no se ha creado en castellano el verbo, pero nos queda el
participio di-lec-to, querido (demasiado culto), pre-di-lec-to, y los citados di-lig-ente y
di-lig-encia. Diligencia es la virtud de escoger algo y hacerlo con
esmero. Y además de ser la virtud contraria a
la pereza, "contra pereza diligencia", también designó al
coche de diligencia, que al final se
llamó simplemente diligencia, llegó al Oeste y da título a la gran película de John Ford.
En griego LEGO significa
decir. Y de él derivan léx-ico, dis-lex-ia o ec-léc-tico. Con la
alternancia E-O (típica de las lenguas
indoeuropeas, la famosa apofonía), de lego deriva
LOGOS, palabra o pensamiento. Es muy interesante que los
griegos tuvieran el mismo término para palabra y para pensamiento, sugiere el paralelismo, o
identidad, entre pensamiento y lenguaje. De logos
derivan lóg-ica, pró-log-o, monó-log-o,
diá-log-o o decá-log-o. Forma parte de los nombres de tantas y
tantas ciencias, Geo-log-ía, Podo-log-ía o Teo-log-ía, y sus
estudiosos, entomó-log-o, oto-rrino-laringó-log-o, también
filó-log-o; log-aritmo (de logos más arithmós,
número), si-log-ismo y anto-log-ía (colección de flores, anthos
= flor, paralelo al latín flori-leg-io); y una muy
curiosa, reloj, de horo-log-ion, estudio de las horas.
Claro, logos está también en la palabra
"etimo-log-ía".