No quiero ponerme pesado para no
cansarte. Lo que te he querido decir con tantas osadías es que creo
que la vida no es un plácido camino hacia cualquiera sabe dónde,
sino que es un constante reto, un continuo atrevimiento. Y ello
porque tenemos dos grandes inconvenientes contra los que hay que
luchar continuamente. Uno es todo eso que hay ahí fuera y que tantas
veces nos impide vivir la vida que uno quiere o la que debería
vivir. Otro es uno mismo, porque muchas veces nosotros mismos nos
ponemos impedimentos para vivir intensamente, humanamente. Está
claro que hay que vivir, pero en muchas ocasiones, para lograrlo, hay
que romper con moldes, con costumbres, con sinsentidos, con manías,
con ignorancias, con prejuicios, con comportamientos que nos alejan
de la vida.
Creo que vivir es atreverse a vivir.
Que tengas un buen
día.