El problema fundamental de la vida es un problema ético.
¿Cómo actuar hoy para crear un mundo más humano?
¿Cómo actuar de manera humana para crear un mundo mejor?
Estoy convencido de que la inmensa
mayoría de las personas no quieren ir ni al cielo, ni al paraíso,
ni a ninguno de esos lugares maravillosos que se prometen. A mí me
parece que no les gustan esos sitios. Si de verdad desearan ir a
alguno de ellos y dado que son tan buenos, intentarían crearlos ya
aquí en la ciudad, en el mundo. Pero parece que les gusta más el
infierno. Buenas noches.
El clima, con sus rarezas, sus cambios
de estado de ánimo y sus enormes y enloquecidos enfados, no cesa de
enviar avisos diciéndonos que el mundo está muy mal. Buenos días.
Concebirlo. Hay que tener
una idea más o menos clara de en qué consiste amar, querer a una
persona. El amor es fundamentalmente una actitud racional, un plan
pensado para ayudar a vivir a otra persona y que afecta a cuestiones
muy concretas de su vida real. Los embobamientos, las tetas
impresionantes, las chocheras, las risas y los aprovechamientos
puede que tengan que ver con el amor, pero muy de lejos.
Sentirlo. Además de su
dimensión racional, el amor tiene otra muy importante, la
emocional. Es la que hace que queramos estar con la persona amada,
que sintamos atracción hacia ella y que estemos a gusto en su
presencia. Pero que exista sólo esta dimensión es peligrosísimo y
suicida. Las emociones por sí solas no te hacen vivir humanamente,
sino sólo estar a gusto (cuando se está a gusto) o a disgusto (que
es como se suele terminar, si no hay una actitud racional que
justifique la vida que se lleva).
Expresarlo. El amor, tanto
el que se le tiene a una pareja como el que se tiene a cualquier
persona, hay que expresarlo. Somos personas y lo propio de las
personas son las palabras. Cuando regalamos algo o cuando elaboramos
un plato con cariño, aunque no lo hagamos para ser correspondidos,
lo normal es que nos digan si ha gustado o no. Lo mismo ocurre con
el amor, cuando lo expresamos, nos sentimos bien y la otra persona
se siente querida, aunque sólo sea de palabra. No veo ninguna razón
por la que haya que callarse estos asuntos.
Hacerlo. No me refiero a lo que se suele denominar 'hacer el amor'. Eso es sexo, que puede
hacerse con amor y sin él. Me refiero a que el amor no es una
situación estática. No es una especie de 'Te quiero y ya está'.
El amor hay que construirlo cada día, con detalles, con decisiones,
con palabras, con risas, con ternura, con sexo, con alegría y con
lágrimas. Cada momento que pase y cada situación que vivamos deben
ser ocasiones para que construyamos el amor. Si no se construye el amor, no
existe.