El problema fundamental de la vida es un problema ético.
¿Cómo actuar hoy para crear un mundo más humano?
¿Cómo actuar de manera humana para crear un mundo mejor?
Nuestras palabras nos retratan, tanto
las que pronunciamos como las que nos callamos. Hay silencios que
dicen mucho. Cuando, siguiendo el proverbio chino, se le señala al
imbécil la luna y se queda mirando al dedo, y empieza a hablar una y
otra vez del dedo, pero jamás de la luna, está mostrando a quien
quiera verla su imbecilidad. Son las voces del silencio.