El amor y los celos son incompatibles.
El problema fundamental de la vida es un problema ético. ¿Cómo actuar hoy para crear un mundo más humano? ¿Cómo actuar de manera humana para crear un mundo mejor?
miércoles, 15 de mayo de 2013
Buenos días. Sensibilidad
Me ocurre a mí, pero estoy seguro de
que no soy el único. Estoy perdiendo sensibilidad para la vida. Hay
veces que no miro y, si miro, hay veces que no veo lo que pasa. Y si
no lo veo, no me entero. Pasan cerca de mí muchas cosas, pero yo no
sé nada de la mayoría de ellas. O no oigo nada o no escucho lo que
oigo. Siempre creí que había dos tipos de olfato. Uno, el sensible,
para oler las flores y las cosas podridas, y otro, el intelectual,
para captar a la buena gente y a los corruptos. El caso es que huelo
cada vez peor. Del gusto ando fatal: con el tiempo me gusta menos
todo. Lo que toco suele resultar diferente de lo que yo pensaba. El
sentido del dolor sólo funciona conmigo. Cada vez me es más ajeno
el dolor de los demás. El sentido común se va volviendo ausente,
raro, peculiar. Me estoy volviendo insensible, como si fuera un trozo
de corcho con apariencia humana.
Intento no perder la sensibilidad, pero
la fuerza de este mundo, de esta sociedad, es grande y noto que me va
comiendo por dentro, que me está adocenando, que me está restando
personalidad y que mi humanidad se resiente. Tendré que tomarme en
serio esto de la sensibilidad, porque en realidad es la puerta que me
abre al mundo. Espero que a ti no te ocurra, pero si no es así,
tendrías que reaccionar. Sin sensibilidad, ni nos enteramos de nada
ni sabremos lo que hay que hacer.
Un buen ejercicio es acordarse de las
personas que queremos, de cómo estarán, de cómo lo estarán
pasando, de qué pueden necesitar. En realidad, mandarles cariño hay
veces que no es suficiente. Es posible que necesiten algo más.
Buenos días.
El calendario de Bautista. 15/ 5/ 2013. Emily Dockinson
martes, 14 de mayo de 2013
Buenas noches. Al anochecer
Aprovecha el anochecer. Hay
situaciones, actitudes, sentimientos que en la noche se ven más
claros, precisamente porque no hay luz que despiste. Pero no en la
cama. En la cama haz lo que dé la gana, menos pensar. Si lo haces,
te imaginarás un mundo desagradable que se te caerá encima. Hazlo
antes, cuando vaya cayendo la tarde, cuando las fuerzas estén
cansadas y el reposo invite a la reflexión.
Y luego, olvídate de todo y relájate.
Repasa las huellas bonitas que te dejó el día, los besos que te
dieron y los que diste, las sonrisas que tuviste la suerte de
contemplar, los abrazos que pudiste tramar, las palabras amables que
oíste y las que dijiste. Y envía a las nubes todo el cariño que
puedas para que las personas a las que quieres reciban una lluvia
cariñosa. Buenas noches.
Buenos días. Penas y alegrías
Las alegrías pasan una detrás de
otra, sin tiempo para entrar en contacto entre sí. Las penas, en
cambio, parece que se quedan a conocerse, a hacerse fuerte entre
ellas y a anidar allá donde se encuentren. Las alegrías vienen y
cumplen su función con sólo su llegada. Las penas, en cambio,
parece que nunca terminan de dejar su mensaje y nos exigen un
esfuerzo tremendo para intentar que se vayan. Quizás la clave esté
en hacerles mucho más caso a las alegrías que a las penas, justo al
revés de lo que solemos hacer. Porque las penas exigen tu atención
y, si no la tienen, se aburren y se marchitan. Y lo que peor les
sienta es que descanses. Te invito a que hoy no te fijes en las
penas, que te instales una sonrisa en los labios y que te eches a
vivir. Buenos días.
lunes, 13 de mayo de 2013
Buenas noches. Una guía magnífica
Ayer tuve la fortuna de asistir en el
Museo Thyssen a una visita guiada por una colección de cuadros que
contenían flores en sus motivos. Fue un rato agradabilísimo y muy
instructivo, sobre todo porque la guía estaba muy versada en el tema
y porque su manera de atendernos fue de las que te reconcilian con la
humanidad. Amable, cortés, sonriente, atenta, ofreciendo sus
explicaciones como si fuera lo más importante que tenía que hacer
en aquel rato, abierta a cualquier pregunta: un lujo. En realidad, el
comportamiento de esta guía debería ser considerado como normal por
cualquier ser humano que lo presenciara, pero las cosas están de tal
manera que lo normal va siendo cada vez más raro, más inhabitual.
Creo que debemos tener en continua
revisión nuestras actitudes, nuestros gestos, nuestra forma de
tratar a los demás. Lo humano, lo valioso no puede caer en la
mediocridad que encontramos con demasiada frecuencia.
Hasta el acto de dormir debe ser un
acto humano. No te olvides de recordar con cariño, con generosidad,
con disponibilidad a las personas a las que quieres antes de que tus
ojos digan adiós al día. Que la nube de cariño que formes hoy sea
especialmente generosa. Buenas noches.
Buenos días. El regalo
Fotografía tomada en el Museo Cerralbo, en Madrid.
La vida es un regalo de contenido
ambiguo. La observas y ves que es una mezcla de luz y de oscuridad,
de manjares agradables y de pesadillas insoportables, de esperanza y
de desolación. Suele venir envuelto, además, el regalo en papeles
de múltiples colores, desde el blanco purísimo hasta las mezclas
más desagradables de ver que te puedas imaginar. Es un regalo muchas
veces extraño, incomprensible, pero es un regalo. Yo estoy
convencido de que hay que acostumbrarse a verle las partes favorables
al regalo y a intentar neutralizar las desagradables. Sólo me falta
que ese convencimiento se convierta en práctica habitual. Disfruta
mucho de este día. Hoy sólo tienes este día para vivir. Buenos
días.
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