sábado, 29 de octubre de 2011

El 'todo vale' en la frutería

Acabo de volver de hacer la compra en la frutería. Mientras estaba allí, ha entrado una señora joven, bien vestida y de aspecto agradable, con una niña pequeña de 4 o 5 años. La niña se ha dirigido a la cesta de las mandarinas y ha tomado una por su cuenta ante las atentas miradas, por una parte, de su madre, que se ha quedado callada y no le ha hecho ninguna indicación a la niña, como si no fuera con ella, y, por otra, de la frutera, a la que se le ha cambiado el tono de la voz.

¿Cómo no va a ganar el PP? Si desde la más tierna infancia educan a los niños en esa trágica norma de 'todo vale', ¿cómo van a creer luego estos niños en el respeto, en el sacrificio, en la igualdad o en la libertad? ¿Entiendes por qué no quieren educación pública? Lo que no quieren es que conviertan a los jóvenes en ciudadanos libres, que piensen por su cuenta y que descubran que hay cosas que no se deben hacer y valores que hay que respetar.

La pobre niña, si alguien no lo remedia, votará al PP el día de mañana y su santa madre, es decir, la señora que parió a la niña, porque de madre, por lo que he visto, tiene poco, ya lo votará ahora y por los siglos de los siglos, porque a ella le va bien.

Habrá que atar las mandarinas con cadenas en las fruterías por si entra esta gente.

Huida



No hace falta ser creyente de ninguna religión para huir de este mundo en cuanto las cosas se ponen incomprensibles.

viernes, 28 de octubre de 2011

Incomprendido



Jack domina todos los palos, encuentra todas las soluciones, resuelve todos los enigmas, sean físicos o metafísicos, conoce todas las claves para el buen funcionamiento del mundo. Él es el dios de una religión incomprendida: la suya.

jueves, 27 de octubre de 2011

Laura Pausini y Eros Ramazotti



Ana Mato por los suelos




Les vale todo. A ellos y a sus cada día más inexplicables votantes. Ahora se han sacado de la manga y lo han lanzado para consumo de los menos dados a pensar, que hay alumnos en Andalucía que no tienen pupitres en su escuela.

Lo intentan demostrar con una foto, pero resulta que la tal foto corresponde a un momento puntual en el que los niños escuchan a una cuentacuentos, y la forma de hacerlo parecía muy indicada para la ocasión. Yo he dado alguna vez clase en el césped, en lugar de hacerlo en el aula, y podría haber venido la diligente Ana Mato, hacernos unas fotos y denunciar que Esperanza Aguirre mantiene los institutos sin pupitres.

La anécdota es una más de las muchas que generan estos días estos señores del PP. La traigo aquí porque revela muy bien la ética de este partido. Quieren estar en el poder como sea, a cualquier precio. Lo necesitan y para ello les vale todo. No les importa generar un modelo de ser humano basado en la mentira, en lo grosero o en lo zafio. Ni se han molestado en comprobar antes si lo que dicen es verdad o no. Qué más les da, si a la gente a la que se dirigen está acostumbrada a tragarse todo lo que les echen encima.

Ana Mato es la directora de la campaña del PP para las próximas elecciones, pero su cota intelectual y moral ha quedado con este suceso, si no pide disculpas, por los suelos.  

martes, 25 de octubre de 2011

Te quiero





Si ahora que quieres a tu pareja, a tu familia, a tus amigos, a todos los que quieres, no se lo dices, ¿cuándo se lo vas a decir? ¿para cuándo lo  vas a dejar?

A mí me gusta mucho que me quieran y que me lo digan. Y cada vez lo digo yo con más facilidad. Sin embargo, estos días he recibido en dos ocasiones, con más alegría que la que da el 'te quiero', otras dos palabras igualmente claves, igualmente mágicas, igualmente reconfortantes. Me las dijeron el oftalmólogo y la médica de cabecera después de sendas revisiones rutinarias: 'todo bien'.

No se me ocurriría ir a preguntarle nada ni al politólogo, ni al sociólogo, ni al antropólogo ni al cosmólogo.

The Zombie Kids




lunes, 24 de octubre de 2011

Hasta la cúspide





Estoy de las ocurrencias, del paraguas, de mis tendones, con sus osis y sus itis, de la gimnasia, de la rehabilitación, de los imprevistos, del photoshop y de mí mismo hasta la cúspide. Necesito tiempo. Tiempo. Tiempooo, Tiempoooooooo.