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Hay que acabar con la violencia en el
mundo. Hay que acabar con una de las peores violencias en el mundo:
la violencia contra las mujeres. Las mujeres están condenadas a
sufrir, en algunos de sus aspectos, la violencia de los machistas. La
pueden padecer en su cuerpo, en su trabajo, en su ocio o en cualquier
lugar. Acabar con esta violencia es acabar con el machismo. Hay que
descubrir al machista. Hay que denunciarlo. Hay que defenderse de él.
Y hay que educarlo. Hay que hacer que aprenda a vivir en igualdad.
Los hombres tenemos mucho que decir aquí, junto a las mujeres o por
separado, que eso no lo tengo muy claro. Hay que levantarse contra el
machismo.