viernes, 13 de enero de 2012

El sabor del mundo



Cuando hay ganas de trabajar y todos tenemos buena voluntad y tratamos de poner lo mejor de nosotros mismos y vamos a construir y no a destruir y no se juzga, sino que se coopera para resolver los problemas, y somos amables y cariñosos y generosos y valoramos lo acertado y nos cuidamos y nos apoyamos, cuando todo es de todos, el mundo sabe riquísimo y se disfruta un montón comiéndoselo.

jueves, 12 de enero de 2012

Horas



Hay horas en las que querrías que el día no acabara nunca y hay otras, sin embargo, en las que desearías que no empezara jamás.

miércoles, 11 de enero de 2012

El vientecillo de la libertad



No es fácil ser libre. A algunos no les gusta nada de nada que los demás puedan ser libres y hacen todo lo posible por que no lo sean. Pero hay veces en las que el mayor inconveniente para la libertad es uno mismo. Sin saber cómo y sin darnos cuenta, nos esclavizamos y nos impedimos ser libres. Nos esclavizamos por los prejuicios que se instalan en nuestra mente y que no criticamos para echarlos fuera. Nos esclavizamos por los deseos, sobre todo por los menos razonables, que arrastran nuestra voluntad hacia donde no deberíamos ir. Nos esclavizamos por nuestras costumbres, heredadas sin saber cómo ni por qué, que tantas veces nos impiden elegir lo diferente, lo nuevo, lo mejor. Nos esclavizamos por nuestros vicios, esos que hemos dejado ir entrando en nuestras vidas hasta que hemos logrado que acaben con nuestra voluntad. Nos esclavizamos por lo que no entendemos, por lo que no nos gusta y lo vivimos como un atentado que nos hace ir a la defensiva. No es nada fácil sentir el vientecillo de la libertad.

martes, 10 de enero de 2012

Compartir.



Qué bella es la belleza. Y qué buena es la bondad. Y qué elegante la elegancia. Y qué humano es compartir la belleza, la bondad y la elegancia.

lunes, 9 de enero de 2012

Causas y efectos



Hay un tipo de ignorancia que consiste en decir que el pimentón huele a chorizo o que el bosque huele a ambientador. Es la ignorancia que confunde las causas con los efectos y, aunque es muy simple, es muy difícil de erradicar.

domingo, 8 de enero de 2012

Regalos



Supongo que te habrán regalado algo en estas fiestas. Lo normal es que un regalo se entienda como una muestra de generosidad de alguien que te dona algo para que seas más feliz con eso que te donan. Sin embargo, déjame que sea un poco malo y que ponga en tela de juicio esta visión de los regalos.

Creo que no todos los regalos son expresiones de generosidad. Hay veces que son la excusa para que el que regala se sienta importante haciendo un buen regalo y afiance así su personalidad. Otras veces no son tanto formas de contribuir a la felicidad de quien recibe el regalo, sino maneras de quedar bien ante él o de imponerle algo que el que regala se empeña en que la otra persona tenga. En ocasiones son también motivos para provocar el agradecimiento del regalado e, incluso, he visto a alguna persona sentirse víctima por lo mucho que regala y lo poco que recibe.

Lo que más veces he observado, incluso en mí, es que no pensamos en lo que le podría gustar a la persona que va a recibir el regalo, sino en lo que me gusta a mí.

También a la generosidad le gusta mucho disfrazarse.

Paul Motian