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lunes, 22 de enero de 2018

Buenas noches. Debemos



El problema de saber lo que podemos hacer es de adolescentes. Lo que se plantea una persona adulta es lo que debemos hacer. 

Buenas noches.


martes, 11 de octubre de 2016

¿No son responsables los votantes del PP?




Tengo la impresión de que los españoles, en conjunto, somos muy peculiares y tendemos a explicar la realidad de maneras un poco raras. Por ejemplo, ahora se tiende a decir por todos que quien tiene la responsabilidad de que en España haya gobierno -cosa, por lo demás, muy conveniente- es el Partido Socialista. Me parece que esto es injusto y, además, falso. ¿No tiene responsabilidad Podemos, que no quiso que fuera presidente Pedro Sánchez y prefirió la posibilidad de que lo fuera Rajoy? Y, sobre todo, ¿no tienen ninguna responsabilidad los votantes del PP, que desean, al parecer, que sea presidente un tipo como Rajoy, que debía haber dimitido hace ya mucho tiempo y que debería estar encerrado, no sé si en su oficina o en otro sitio? Ahora va a resultar que los que miran para otro lado y votan al PP no tienen ninguna responsabilidad en la situación actual.

viernes, 26 de febrero de 2016

Lo que veo



Yo creía que el deseo de acabar con el bipartidismo respondía a una intención de abrir el abanico ideológico español a nuevas opciones, con las que habría que lograr tanto gobiernos con mayor representación, como pactos estables, en los que hubiera acuerdos en asuntos básicos y comunes.

Pronto me di cuenta de que esto no era exactamente así y que lo que comenzaba a aparecer eran ciertas actitudes exclusivistas, que se consideraban portadoras de la única solución posible y que descalificaban cualquier otra opción que no fueran las suyas. Estas intenciones, situadas a ambos extremos del espectro político, no veo que logren expresar con claridad un deseo de establecer pactos, sino, más bien, algo así como la intención de llevar a cabo la imposición de los propios criterios, aunque para ello los demás tengan que doblegarse o desaparecer del mapa. Ya hemos tenido ocasión de vivir esta actitud desde el gobierno de la derecha durante cuatro años, con la herencia de destrucción que nos ha dejado, y ahora parece que desde el otro extremo se apuntan maneras en el mismo sentido.

No veo la menor intención de pactar en algunos sectores. Por poner un ejemplo, ¿se imagina alguien un pacto educativo en España, en el que participaran el PP y Podemos, además del resto de partidos? Yo, tal como están las cosas en la actualidad, no.


Roto el bipartidismo, me parece que lo que hay que plantearse en serio es si queremos una especie de gobierno de coalición, en el que entren todos, aportando y cediendo, y en el que vayamos avanzando todos, aunque sea poco a poco y trabajosamente, o si queremos una especie de revolución que, si es lenta, será, con la dispersión actual, a costa de que siga gobernando la derecha, y si es brusca, no quiero ni imaginarme en qué pueda consistir. Puede que esté equivocado, pero esto es lo que, con preocupación, veo.

lunes, 21 de diciembre de 2015

Lo de los 123 escaños



Quizás en el fondo no sea tan difícil de comprender.

Toma papel y lápiz y escribe:

La corrupción no es problema. Ante la tentación de la corrupción, todos caemos.
No mienten, es que saben mucho más que nosotros y lo dicen.
No son unos ineptos. Saben mejor que nosotros lo que tienen que hacer.

No nos tratan como a tontos, sino que están muy convencidos de lo que dicen y de que eso es la verdad.
En realidad yo soy un empresario y debo defender mi capital, mi furgoneta y mis trabajitos.
Como vengan los otros, me van a obligar a cobrar el IVA y luego, a pagarlo yo. Eso no puede ser.
Cualquiera sabe lo que se les va a ocurrir hacer a toda esta gentuza con los ahorros del Banco.
Hablan de cosas que no me gustan nada, como, por ejemplo, de la igualdad. ¿Cómo vamos a ser todos iguales?
A algunos incluso se les ocurre decir que las mujeres tienen los mismos derechos que los hombres. Es lo que faltaba.
A un rojo de mierda yo no lo votaré en la vida. Si desaparecieran, mejor.
El coletas ese de Podemos es muy peligroso. Hay que evitar que llegue al poder.
Los del catalán están muy tiernos y son capaces de poner arriba a uno de izquierdas. Ya lo han hecho en algún sitio.
Hay que defender la libertad, que es lo más importante. Y quien no pueda ser libre que se joda.
Los extranjeros lo que tienen que hacer es irse a su país. Aquí no pintan nada.
Que no salga el PSOE de ninguna de las maneras.
Sanidad y Educación para todos, si se puede. El que no pueda, que espabile.
A mí que me hablen bien clarito y que se dejen de historias de que todos no sé qué y de derechos, que no son más que infundios de los comunistas.
Más vale bueno conocido que malo por conocer.
Hay que defender a España, la patria de todos, que no se puede dividir.
Yo tengo que defender lo mío por encima de todo.
Los rojos son unos violentos. Mira lo que le han hecho a Rajoy en Pontevedra.
Esto de la democracia lo único que trae son líos. Yo, a lo seguro.

Ahora repasa esta lista y haz el esfuerzo de pensar que más de 7 millones de ciudadanos españoles, más de la cuarta parte de los votantes de este país, están de acuerdo con la mayor parte de lo que aparece en esta lista. Creo que así se puede comprender lo de los 123. Quizás pienses que esto se debe a la ignorancia, a la falta de crítica en la educación, al exceso de televisión, a que las mentes están distorsionadas, a que hay gente a la que le gusta sufrir o a que cada cual va a lo suyo, sin que le importe nada lo de los demás. Es posible, pero, en todo caso, es lo que hay, es lo que hemos logrado construir entre todos. Una joya de país.

martes, 26 de mayo de 2015

Lo que creo que ha quedado tras las elecciones.



Ni Manuela Carmena ni Ada Colau son militantes de Podemos. Tampoco lo son de los partidos por los que se presentaban ni Ángel Gabilondo ni Luis García Montero. Si quieren pactar, ¿quién pondrá las condiciones, ellos, los partidos o sus grupos?

Lo de los pactos lleva camino de convertirse en un espectáculo enorme. En este asunto se van a retratar los partidos mucho más que en los programas.

¿Van a exigir Podemos y Ciudadanos las mismas condiciones y en la misma forma que le han exigido a Susana Díaz en Andalucía?

Los defensores del pluripartidismo ¿tienen pensado cómo se gobierna así o van a hacer lo posible por llegar al monopartidismo?

¿Por qué nadie en la campaña ni en los programas ha hablado de la manera de financiar lo que pretenden hacer?

¿Qué ha pasado con el voto de las mujeres? El único partido que llevaba el mismo número de mujeres que de hombres en sus listas era el PSOE. ¿En qué situación quedan los problemas de discriminación que sufren las mujeres en el resto de partidos?

¿Van a hacer suyos los partidos de izquierdas el aire fresco que viene de Podemos?

¿Serán capaces Ciudadanos y Podemos de quitarse de encima el aire de intransigencia con el que han aparecido?


Espero que las negociaciones y los pactos no olviden los problemas concretos y reales de los ciudadanos.

miércoles, 13 de mayo de 2015

Lo que veo cuando miro. El partido único



Comenzaron queriendo echar abajo el bipartidismo. Pensé que pretendían una situación a la italiana, con varios partidos que se las ingenian para gobernar, aunque cuando lo consiguen dure poco la legislatura. Yo no le veía la gracia ni la eficacia a la medida, pero era esto lo que decían.

Cuando pensaba que lo que buscaban era un pluripartidismo, empezaron a difundir que PP y PSOE eran lo mismo. Supongo que lo decían porque con un gobierno europeo dominado por el neoliberalismo de la derecha y por los ricos del Fondo Monetario y del Banco Central, en ningún país se puede ser alegre y libremente de izquierdas. Véase lo ocurrido en Francia y lo que está ocurriendo en Grecia. El PSOE se vio obligado en su momento a hacer concesiones para que España no fuera intervenida y eso lo interpretaron como que pretendía lo mismo que el PP. ¿Qué hubiese podido hacer otro partido de izquierdas en el poder?

Ahora que el PSOE ha ganado las elecciones en Andalucía, se trataba de que Podemos demostrara que lo que querían era pactar, llegar a acuerdos, hacer posible un gobierno en un contexto pluripartidista. Pues, por lo que se ve, no hay manera de pactar. Parece que con vistas a las elecciones no se puede ceder nada ante el PSOE, después de haberlo puesto a parir tan duramente. Si Podemos lo hace, es posible que piensen que en un electorado con poca experiencia de pactos -igual que ellos- perderían credibilidad.

Yo creo que poco a poco van poniéndose las cosas algo más claras. Hoy he visto en el muro de una seguidora de Podemos la imagen con la que ilustro este comentario. Resulta que al PP hay que tirarlo a la basura, y al PSOE, también. Lo de acabar con el bipartidismo, en realidad, quería decir que había que acabar con los dos partidos principales. ¿Para qué? Pues parece evidente que para ponerse ellos, que traen lo nuevo y la solución a todos los problemas. Acabar con el bipartidismo no era entrar en un pluripartidismo, sino en un monopartidismo, en el de su partido.


Y esto sí que me parece francamente peligroso. De partidos únicos yo no quiero saber nada, que ya la historia nos ha mostrado lo que dan de sí. No me extraña que muchas personas sencillas les tengan miedo. Espero que este experimento siga bajando en las encuestas y en las votaciones, porque no me imagino nada bueno con ellos en el poder.

jueves, 12 de febrero de 2015

Lo que veo. Podemos



No tengo una opinión formada sobre Podemos, porque no conozco su programa ni sus estrategias concretas, sino sus declaraciones de intenciones, que me parecen, más o menos, como las de todos: intenciones.

Me gustaría que explicaran no qué quieren hacer, sino cómo van a hacer lo que dicen que hay que hacer. Creo que en la situación actual esta es la clave para tomar una decisión sensata.

Me gustaría también que no cayeran tan fácilmente en lo mismo que critican. El tratamiento del caso Monedero ha sido, dicho con sus mismas palabras, propio de lo que llaman la casta. Para reaccionar así no hay que hacer ningún montaje como el que están haciendo.

Temo mucho el entusiasmo que, sin tener claro su programa, están provocando en tantas personas. Muchas veces las emociones no dejan pensar fríamente. Ya han tenido que cambiar las propuestas económicas que tanto fervor produjeron en las Elecciones Europeas, y el estilo de comunicación con los ciudadanos que muestran no me parece distinto del de otros partidos. Conozco a muchos fans de Podemos que no tuvieron ningún inconveniente en abstenerse en las elecciones anteriores, sin tener en cuenta que eso podía dar lugar a la mayoría absoluta del PP que padecemos todos, especialmente los más pobres.


No me pronuncio del todo sobre Podemos, pero aún no me han dado ningún indicio esperanzador de que la vida puede ir mejor con ellos. Y espero del buen sentido democrático de los defensores de Podemos para que no me condenen por pensar así.

Buenas tardes.

martes, 27 de mayo de 2014

Lo que veo cuando miro. Ya pasaron las elecciones



Han pasado ya las elecciones europeas, con sus correspondientes éxitos y fracasos.

Ha votado el 45,84 % de ciudadanos y se ha abstenido el 54,16 %. Interpretar la abstención es difícil porque los motivos pueden ser muy variados. Es posible que haya ciudadanos que estén desencantados con la forma de proceder de la política actual, o en desacuerdo con el sistema -no sabemos si preferirán uno no democrático o una democracia de otro tipo- o simplemente no entienden de política y no saben a quién votar. En todo caso, que más de la mitad del país no participe debería ser una preocupación importante para los dirigentes del país y para los propios ciudadanos.

Los resultados del PP no me interesan demasiado. El PP sólo interesa a los individualistas, a los egoístas, a los que tienen sed de dinero y a los que los demás no les importa nada. Quienes no hayan encontrado en ese partido lo que buscaban se habrán ido a UPyD o a alguna otra formación parecida. Poco va a adelantar España y los españoles con estas personas. Creo que no tienen remedio.

El PSOE se ha gastado demasiado. Yo creo que no es tan malo como muchos ciudadanos creen. Han tenido que sufrir en sus propias carnes la dificilísima situación de un partido de izquierdas en una nación que tiene que gobernar con la derecha en Europa. Hay quienes piensan que esta situación se puede llevar de otra manera, pero ni miran lo ocurrido en Francia ni explican con claridad cómo sería de hecho esa situación. Dicen que 'otra situación es posible' y que 'sí se puede'. Lo que yo no acabo de ver claro es si hablan de una posibilidad teórica o de una posibilidad real, efectiva. Nadie ha explicado como sería, de hecho, esta nueva posibilidad.

Siempre he pensado, por otra parte, que Rubalcaba ha preferido gastarse él en estas elecciones y en esta coyuntura, antes de exponer a un candidato -o candidata- nuevo al desgaste de una situación social muy adversa por la crisis y por las incomprensiones actuales. No sé si estaré equivocado. A estas horas ya ha dicho que se va. No sé si Lissavetzky o Tomás Gómez tienen futuro o no. No sé si en este país alguien tiene futuro.

No sé si Podemos tendrá futuro. Ojalá lo tenga. Tampoco sé cómo sería ese futuro ni en dónde lo tendrá, porque su líder, que ha sacado plaza en el Parlamento Europeo, dice que no le importaría ser cabeza de su partido en las elecciones generales españolas. Mal empezamos así, me parece a mí.

Uno de los graves problemas de este país son, a mi juicio, los ciudadanos, su situación económica y su actitud política. Veo a muchos de ellos ajenos a la política, como si no les afectase demasiado, como si sintieran que no pueden hacer nada, como si pensaran que la política debe arreglarles su situación, pero al margen de ellos y de su colaboración. Tengo la impresión de que muchos ciudadanos se han ido de su mundo real, pero no sé a dónde.

Hay políticos que me parece que han perdido bastante sensibilidad. Demasiados de ellos están sordos, porque no oyen a los ciudadanos; están mudos, porque no explican lo que hacen; están ciegos, porque no ven lo que habría que hacer; no huelen, porque no captan cómo puede ser el futuro; y no tocan nada nuevo, no les duele nada que no sea su propia situación y de la su partido.

Veo mal la democracia, que es un sistema que necesita la participación de los ciudadanos. Pero participar es ser parte de algo y no los veo sintiéndose parte de la colectividad, ni mucho menos una parte activa.